Depilación Láser

DEPILACION LASER
La depilación láser es un método de depilación que existe desde 1994 basado en la eliminación del vello de forma permanente mediante la emisión lumínica del láser, por lo que es un tipo de fotodepilación.
Antes del tratamiento se rasura el vello de la zona a tratar y dependiendo del tipo de piel y del vello del paciente se ajustan los parámetros para obtener los mejores resultados.
El paciente y el operador deben ponerse gafas de protección y es conveniente utilizar un sistema de crioterapia o enfriamiento para minimizar el dolor y el enrojecimiento posterior de la zona.
Al final del tratamiento es aconsejable el uso de cremas hidratantes para calmar la zona tratada, así como de bloqueador solar. Sin embargo, no es necesario el uso de cremas en el uso de algunos láseres de nueva generación.
La depilación láser es un método de depilación permanente del vello. Es decir, el vello eliminado no vuelve a crecer y es normal que se necesiten varias sesiones para eliminar la mayor parte del vello en la zona corporal. Existe un porcentaje del vello que queda con poca melanina y el mismo no es posible de eliminar con alta eficacia.
Los resultados de la depilación láser pueden estar muy influenciados por las hormonas tanto en hombre como mujer y en el área facial se produce un crecimiento de vello nuevo de forma muy común y en algunos casos en el cuerpo durante gran parte de la vida, por lo que en estas zonas no es posible la eliminación total y definitiva del mismo. Por ello, es común la realización de más sesiones posteriores al tratamiento para eliminar el nuevo vello.
Se aconseja no depilar la zona tratada con ceras ni pinzas ni ningún sistema que arranque el vello de raíz antes y después de aplicar el láser. De esta forma hace más efecto al dañar el folículo piloso.